“Arzobispo Carranza” Bartolomé  Carranza de Miranda (1.503-1.576) Arzobispo de Toledo. Detenido por la inquisición por hereje y simpatizante de Erasmo, Lutero y Calvino. Fue calumniado y juzgado injustamente durante 17 años en España y Roma. En 1.993 sus restos fueron traídos de nuevo a España por la mediación diplomática religiosa. Sus restos se encuentran en la Catedral de Toledo.

De alguna manera nos dejó escritas  unas palabras salidas de esas horas difíciles que le tocó vivir. Palabras que pienso que nos pueden hacer reflexionar después de 500 años. Estas son: (Según lenguaje de la época)

“Son hoy muy odiosas qualesquier verdades y muy peligrosas las habilidades y las necedades se suelen pagar caro. El necio callando parece discreto y el sabio hablando se verá en aprieto. Y será el efecto de su razonar acaescerle cosa que aprende a callar. Conviene hacerse el hombre ya mudo, y aun entontecerse el que es más agudo de tanta calumnia como hay en hablar: sólo una pajita todo un monte prende y toda palabrita que el necio no entiende gran fuego prende; y, para se apagar, no hay otro remedio si no es con callar.»

En el caso de Bartolomé, Juan de Valdés fue el gran y temible inquisidor que se le opuso y consiguió detenerle acusandole de herejía, y esto, a pesar de ser consejero de Felipe II.
Encarcelado en Roma, tres papas juzgaron su causa y no pudieron ver un delito claro en él. Al fin obtuvo la libertad muriendo unas pocas semanas después.
El odio, los celos y la envidia siempre están al acecho de su presa utilizando el medio oportuno.

Dice Cristo:

Juan 15:20 «Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra.»

2 Timoteo 3:12 «Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución;»